Mostrando entradas con la etiqueta Ángel González. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Ángel González. Mostrar todas las entradas

25 de diciembre de 2017

Así me basta - Ángel González




Vídeo. Poema: Me basta así. Ángel González. Recital poético. Poesía Española Contemporánea. Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.


Ángel González
 6 de septiembre de 1925
Oviedo (Asturias)
12 de enero de 2008 (Madrid)



14 de noviembre de 2012

Ángel González - Caída



Caída

Y me vuelvo a caer desde mí mismo

al vacío,

a la nada.

               ¡Qué pirueta!

¿Desciendo o vuelo?

No lo sé.

               Recibo

el golpe de rigor, y me incorporo.

Me toco para ver si hubo un gran daño,

mas no me encuentro.

Mi cuerpo ¿dónde está?

Me duele sólo el alma.

Nada grave.



















Coleccion palabra de honor
Visor Poesia




Estaré esta que me echen y epitafio Biel Vila Pujadas, Ediciones la Baragaña



*



No quiero reconocer mí rostro ni mañana, inédito dr Biel Vila Pujadas


12 de enero de 2012

Poemas de Ángel González

ME BASTA ASÍ
Si yo fuese Dios
y tuviese el secreto,
haría un ser exacto a ti;
lo probaría
(a la manera de los panaderos
cuando prueban el pan, es decir:
con la boca),
y si ese sabor fuese
igual al tuyo, o sea
tu mismo olor, y tu manera
de sonreír,
y de guardar silencio,
y de estrechar mi mano estrictamente,
y de besarnos sin hacernos daño
—de esto sí estoy seguro: pongo
tanta atención cuando te beso—;
                                entonces,
si yo fuese Dios,
podría repetirte y repetirte,
siempre la misma y siempre diferente,
sin cansarme jamás del juego idéntico,
sin desdeñar tampoco la que fuiste
por la que ibas a ser dentro de nada;
ya no sé si me explico, pero quiero
aclarar que si yo fuese
Dios, haría
lo posible por ser Ángel González
para quererte tal como te quiero,
para aguardar con calma
a que te crees tú misma cada día
a que sorprendas todas las mañanas
la luz recién nacida con tu propia
luz, y corras
la cortina impalpable que separa
el sueño de la vida,
resucitándome con tu palabra,
Lázaro alegre,
yo,
mojado todavía
de sombras y pereza,
sorprendido y absorto
en la contemplación de todo aquello
que, en unión de mí mismo,
recuperas y salvas, mueves, dejas
abandonado cuando —luego— callas...
(Escucho tu silencio.
                     Oigo
constelaciones: existes.
                        Creo en ti.
                                    Eres.
                                          Me basta).



***



CUMPLEAÑOS
Yo lo noto: cómo me voy volviendo
menos cierto, confuso,
disolviéndome en aire
cotidiano, burdo
jirón de mí, deshilachado
y roto por los puños.
Yo comprendo: he vivido
un año más, y eso es muy duro.
¡Mover el corazón todos los días
casi cien veces por minuto!
Para vivir un año es necesario
morirse muchas veces mucho.



***



Carta sin despedida

A veces,    
mi egoísmo
me llena de maldad,
y te odio casi
hasta hacerme daño
a mí mismo:
son los celos, la envidia,
el asco
al hombre, mi semejante
aborrecible, como yo
corrompido y sin
remedio,
mi querido
hermano y parigual en la desgracia.

A veces -o mejor dicho:
casi nunca-,
te odio tanto que te veo
distinta.
Ni en corazón ni en alma
te pareces
a la que amaba sólo
hace un instante,
y hasta tu cuerpo cambia
y es más bello
-quizá por imposible y por lejano-.

Pero el odio también me
modifica
a mí mismo,
y cuando quiero darme
cuenta
soy otro
que no odia, que ama
a esa desconocida cuyo nombre es el tuyo,
que lleva tu apellido,
y tiene,
igual que tú,
largo el cabello.
Cuando sonríes, yo te reconozco,
identifico tu perfil
primero,
y vuelvo a verte,
al fin,
tal como eras, como sigues
siendo,
como serás ya siempre,
mientras te ame.







Ángel González  Palabra sobre palabra
 Obra completa- 1956 -2001-
Editorial Seix Barral

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...